Monday, August 22, 2011

La Marcha Laica


El día 17 de agosto, víspera de la llegada del Papa, asistí a la manifestación autorizada que convocaba Europa Laica con el lema "De mis impuestos, al Papa cero". A pesar del gran número de asistentes ¿20.000?, el recorrido iba a transcurrir por calles angostas como Carretas, Dr. Cortezo y calle de La Cruz. Todo transcurría normalmente hasta nuestra llegada a La Puerta del Sol bajando por la calle de Carretas; allí, las juventudes del JMJ, no sabemos si convocadas por alguien o motu propio, decidieron que no nos dejarían avanzar y nos tuvieron más de una hora parados soltándonos todo tipo de improperios. A mis amigos Chitina, Alberto, Pulgar y a mí, nos pilló el tema a la altura del antiguo cine Carretas y no podíamos comprender tanta intolerancia. La policía no hacia nada para frenarlos pero entre banderas vaticanas, otras de otros países y alguna del régimen franquista los crucifijos no dejaban de aflorar amenazadoramente; trato de ponerme en la piel de alguno de ellos y pienso que quizá nos veían como a la niña de la película El exorcista y pretendían sacarnos el demonio del cuerpo; no logré ver a ningún padre Karras pero si a una Sor Citroen que me miraba como si yo fuese el mismísimo Lucifer. La policía tenía la obligación de dejar libre todo el recorrido y aquello no debió de haber sucedido nunca; por fortuna las cosas no pasaron a mayores y no porque Dios no quiso sino porque el movimiento laico es absolutamente pacífico. Para nosotros no había ningún casus belli. Entre los agnósticos no crecen Breivik como el ultracristiano asesino de Oslo. No tenemos ningún Dios por quien matar. Nosotros pensamos no dogmatizamos. Somos personas no pastores y rebaño como dice La Biblia. No creemos que nadie sea infalible, empezando por el Papa. Solo pretendíamos mostrar nuestra protesta en una manifestación autorizada y nos cortaron el recorrido con el consentimiento de la policía.

No será porque no han tenido espacio para rezar en todo Madrid.

Saturday, August 13, 2011

Hambre en El Cuerno de África


Ayer, viendo en los informativos lo que hacían los agricultores franceses con nuestros camiones de fruta sentí vergüenza ajena; ver como destrozan alimentos que servirían para paliar el hambre en El Cuerno de África debería rebelarnos a todos. Dicen que el hambre mata poco a poco y que es difícil evaluar las cifras pero desde junio han muerto 26.000 niños. Este es un tema con el que es muy fácil hacer demagogia y no me gustaría caer en ello pero hay soluciones y tenemos que darlas ya.

Hay, en nuestro país, millones de melocotones y nectarinas que no tienen salida en el mercado y servirán de abono para el campo y dentro de unos días podremos contemplar la espantosa fiesta de la "tomatina" de Buñol, un pueblo de Valencia donde toneladas de tomates -una fuente de vitamina C- se utilizaran por pura diversión y por puro derroche.

Estamos comiendo manzanas de Nueva Zelanda, cerezas de Chile, papayas de Brasil, mangos de Perú etc., lo que indica que aguantan muy bien una semana en frigoríficos y todos sabemos por experiencia que después aguantan otra semana en nuestras neveras. ¿No es posible situar los alimentos en barcos frigoríficos en El Cuerno de África para alimentar a estas familias que se están muriendo? No parece muy complicado y además veríamos los resultados de las ayudas que estamos dando a las ONGs. Solemos justificarnos diciendo que cuanto damos, la mitad se queda por el camino y no nos falta razón, pero no podemos desentendernos del tema. La gente se muere de hambre.

El Hambre en el mundo debería ser portada diaria en todos los informativos de prensa radio y televisión para llamar a las conciencias de todo el mundo. Es cierto que hay un orden de prioridades, los que más tienen deberían poner más, pero todos somos responsables y podemos hacer más.
El gobierno español ha enviado una ayuda de siete millones de euros, algo claramente insufiente pero algo es algo. La Secretaria de ¡Educación! de las Nuevas generaciones del PP en Asturias, como respuesta a esta iniciativa del Gobierno, ha respondido en Twiter: ¡En España no cabe un tonto más!. Sin comentarios.




Wednesday, August 10, 2011

Steve Mc Curry


Esta foto de la niña afgana fue la portada más importante de la revista National Geographic en sus 114 años de existencia. Su autor, Steve Mc Curry (Filadelfia, EEUU,1950), es uno de los mejores fotógrafos del mundo. Su carrera como fotógrafo freelance se disparó cuando, disfrazado con vestimenta de los nativos, cruzó la frontera de Pakistán y entró en la zona controlada por los rebeldes de Afganistán. Cuando regresó, llevaba los carretes de fotos cosidos entre la ropa y fue el primero en mostrar al mundo las imágenes del conflicto.


El Casal Solleric que está en el Paseo del Borne de Palma de Mallorca acoge hasta el 4 de septiembre una exposición de sus mejores trabajos realizados durante los últimos 27 años. Al lado de impresionantes vistas de ciudades de arenisca, paisajes montañosos y viejos templos, aparecen niños que han perdido la inocencia en su mirada y ancianos que carecen de esperanza. Son retratos directos, sin artificio, donde los ojos juegan un papel principal en imágenes persuasivas, inolvidables y conmovedoras que están llenas de luz y color.


Es miembro de Magnum Photo y acumula numeroso premios, incluyendo el Robert Capa Gold Medal por el mejor reportaje de fotos en el extranjero. Mc Curry ha cubierto muchas zonas de conflicto como Birmania, Sri Lanka, la antigua Yugoslavia, India, Afganistán y Beirut, entre otros, centrándose en las consecuencias humanas de la guerra.
La niña de la foto que todos hemos visto en alguna ocasión se llamaba Sharbat Gula y después de una intensa búsqueda de 17 años, Steve MC Curry logró reencontrarse con ella y National Geographic hizo un documental para recordarlo.


La exposición itinerante recorrerá muchas ciudades españolas, si tienes ocasión no te la pierdas, es tan fascinante que a mi no me importaría volver a verla.


Tuesday, August 02, 2011

Paco Cano




Cuando Manolete entró a matar, Cano estaba allí. El 28 de agosto de 1947 el toro más famoso de la historia, Islero, hería mortalmente al torero más famoso de la historia, Manolete. "Canito" era el único reportero gráfico que asistió a la corrida y su cámara recogió la instantánea que dio la vuelta al mundo. Al día siguiente plasmó también la imagen viva de la muerte: Manolete amortajado. La tragedia sumó aún más en la negrura a una España que carecia de primavera. Con frecuencia me han recordado mis mayores -ya quedan pocos- que yo también estaba en la plaza de toros, con año y medio en brazos de mi madre ese día de S. Agustín en las fiestas de Linares.

He tenido oportunidad de conocer a "Canito" en la Feria de Santiago de Santander de este año y charlar con él. Es un hombre menudo, sencillo y muy lúcido que lleva a gala su edad plasmada en la gorrilla azul: 1912. Sólo tiene 99 años y sigue haciendo lo que más le gusta, fotos taurinas. Las malas lenguas dicen que la otra cámara que lleva para las peticiones de los aficionados, no tiene carrete. En su juventud fue bailarin, profesor de natación, boxeador y novillero. Goza de una memoria prodigiosa, salvo si le preguntan por sus amoríos.

Francisco Cano "Canito" es el decano de los fotógrafos taurinos y referente indiscutible de la fotografía taurina del siglo XX. En su libro Mitos de Cano que acaba de editar Rom Editors aparecen muchos de los  famosos que conoció a lo largo de su vida.

Nos vemos el próximo año maestro y que viva Alicante "la millor terreta del món".