Los Narcocorridos

La canción protesta nace para sacudir la conciencia de mentes acomodadas y tiene sus origenes en los EEUU durante la guerra del  Vietnan. Bob Dilan y Joan Baez son sus máximos exponentes. En America latina, Atahualpa Yupanqui, Cafrune, Violeta Parra, Victor Jara y el grupo Quilapayun,  y en España, el cantante y poeta francés Georges Brassens fue sin duda  el que más influjo tuvo sobre los españoles que comenzaron a aparecer en el tardofranquismo como  LLac, Serrat, Raimon etc. En los ochenta, Carlos Mejia Godoy hizo popular una canción con la que enseñaba a montar un fusil a los soldados de la revolución sandinista, que luego se quedó en  agua de borrajas, y ahora, en Méjico, con un punto bastante original y arriesgando sus propias vidas, están de plena actualidad los Narco Corridos.

La mayoría de los grupos y cantantes está amenazados de muerte por los cárteles de la droga, algunos de los cárteles son tan conocidos como los de Sinaloa, Tijuana y Juarez, pero hay muchos más. El último cantante asesinado, tan sólo hace una semana, se llamaba Sergio Vega "El Shaka". Lo dejó todo bien arreglado por si le mataban, la herencia era para sus dieciocho hijos, aunque se calcula que ahora aparecerán muchos más. Cuando les preguntaron a los sicarios por qué le dispararon treinta veces a quemarropa, contestaron como el chiste de Gila pero con acento de Guanajuato "pues no más, el hijo de la gran chingada, no dejaba de llamarnos asesinos..."

En ese pueblo tan deliciosamente ingenioso, creador de neologismos a diario para gloria de nuestra lengua y que tanta gracia nos hace por su acento, es uno de los sitíos donde más me he reido; a su manera, y con el peligro que conlleva, los grupos de narcocorridos denuncian el drama que se vive en el norte;  algunos de los más famosos son Los Tucanes, Los Morros del norte, Los Amables del norte y los Tigres del norte; el que traigo hoy aquí, es uno de los de más éxito: Exterminador.

      

Para los mejicanos, el río Bravo marca la distancia entre el norte  y el sur condicionando sus vidas; los récords de muertes por el narcotráfico se baten todos lo años; en lo que llevamos del 2010 son más de mil victimas las que se ha cobrado la droga.

La duda no es una condición placentera

pero la certeza es absurda

Voltaire

Principios de bioética laica, Javier Sádaba

Se abre un gran horizonte para aquellos que tienen la inmensa fortuna de no haber perdido la curiosidad; no es necesario estar especializado en cualquier rama de la ciencia o de la filosofía, sino ser simplemente un ser humano comprometido con su entorno y movido por el Sapere Aude de Quinto Horacio Flaco.

Los ratones knockout, la cacotanasia, la fisión binaria, el Stem Cell, la ortotanasia etc. son temas desconocidos para un neófito en la bioética pero sin duda apasionantes cuando te los cuenta Javier Sádaba (Portugalete, 1940) en un ensayo, Principios de Bioética Laica (2004, Gedisa editorial) con ausencia de dogmatismo y con sencillez para una mayor comprehensión de neófitos entre los que me encuentro.

Entre el cúmulo de preguntas que plantea, hay alguna que te deja con la mente en blanco por el efecto sorpresa que produce en el lector ¿que trato le daríamos si se nos presentara ahora un autrolopitecus o un nearthental?

No es cuestión de decir que sí a todo, por el simple hecho de que sea innovador tener una mente abierta a la investigación científica y considerar que es acorde con el pensamiento laico, humanista, racional etc... y por otra parte tampoco habría que negarse a los avances científicos como ha sucedido tradicionalmente por las mentes más conservadoras con el argumento de que es mejor dejar las cosas como están o que hay que poner freno porque de lo contrario seria un desmadre de imprevisibles consecuencias. En la primera decisión actuaríamos como un papagayo diciendo que sí a todo sin cuestionarnos nada y en la segunda seriamos un avestruz que cree que escondiendo su cabeza no se mojará en caso de lluvia. Ambos términos nos acercarían a los animales irracionales (?) y, si bien no estamos tan lejos de ellos como algunos piensan, quizás no sea el camino más adecuado, por tanto, habremos de llegar a acuerdos, que, en esto como en tantas cosas en la vida, son absolutamente necesarios para avanzar.
Es el eterno debate entre ciencia y religión y un conflicto de intereses de muy difícil solución por cuanto el conocimiento aleja al hombre de la religión, pero ésta sigue jugando un papel fundamental, no tanto en cuanto poder con capacidad de decisión, sino por asentamiento social -que no rigor moral- que de ninguna manera podemos soslayar.
Sádaba se sigue y nos sigue haciendo preguntas sobre algunos conceptos como la dignidad, la libertad etc, y, curiosamente en una de las mentes más brillantes del panorama filosófico español, no desarrolla ninguna teoría, sino que deja la filosofía para el lector, así que yo no voy a desaprovechar la ocasión: con el concepto dignidad jugamos todos, creyentes y no creyentes. La dignidad, como la libertad o el derecho a la vida son conceptos abstractos sujetos a un sinfín de interpretaciones, no es lo mismo la libertad de la que habla Israel, que de la que habla Palestina, por ejemplo, ni la interpretación sobre la defensa del derecho a la vida que hace un objetor que está dispuesto a ir a la cárcel con tal de no matar a un semejante en el campo de batalla, que la que hace la Conferencia Episcopal española tan preocupada por el aborto, pero tan despreocupada por el soldado que no quiere matar.

También se puede desmoronar el peso de la ideología cuando se trata de nuestra salud, un buen ejemplo de ello lo tenemos en el matrimonio Reagan, a raíz de descubrirse que el ex presidente padecía Alzheimer, la Sra. Reagan no tuvo empacho en abogar por la investigación con células madre, a pesar de sus creencias ultra conservadoras y muy cercanas a la línea creacionista. Sin ir tan lejos, en nuestro país, con uno de los sistemas de cobertura médica por parte del estado más avanzado del mundo, son muchos los ciudadanos que suelen denominarlo "la inseguridad social", salvo cuando tienen que ir a urgencias claro está. Alonso Quijano lo definía muy bien: "cosas veredes amigo Sancho..."

Estamos en un proceso en el que la ciencia-ficción que conocíamos se ha convertido rápidamente en realidad. Nos encontramos con puertas cuyos pomos jamás habíamos visto antes, y nuestros asideros carecen de fijación, pero también estamos entrando en un mundo apasionante para aquellos que quieran atreverse a saber, y Sádaba, instalándonos en la duda como punto de referencia, nos enciende algunas bombillas.
La conclusión es una de las pocas cosas que Sádaba deja muy claro en el libro: la bioética o es laica o no es.

Este blog está de luto

En ningún momento de la historia, en ningún lugar del planeta, las religiones han servido para que los seres humanos se acerquen unos a los otros. Por el contrario, sólo han servido para separar, para quemar, para torturar. No creo en Dios, no lo necesito y además soy buena persona
José Saramago (1922-2010)

La ONT premio Príncipe de Asturias

Este mes se cumplen 21 años del nacimiento de la Organización Nacional de trasplantes (ONT). Buena ocasión para otorgarle un premio que, por una vez, no admite controversia: el Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional compartido con Transplantation Society de Canadá.

No existe actividad curativa que reúna más esfuerzo por parte de la sociedad que el trasplante de órganos. Somos líderes mundiales y el modelo español de coordinación es el mejor del mundo. La Unión Europea, esa que tanto nos machaca últimamente, va a implantar el sistema español o " Spanish Model" como es conocido, con el propósito de bajar la cifra de 12 europeos que mueren diariamente a la espera de un órgano.

La U.E. podría dar un paso más: aprobar la donación obligatoría de órganos en toda la comunidad .
El siguiente paso es algo que no puede hacer sola la OMS (Organización Mundial de la Salud)  sin el voto unánime de la ONU. Yo creo que esa ONU que no sirve para casi nada, siempre prisionera del derecho a veto, ganaría mucha credibilidad si consiguiera poner a todos los países de acuerdo en algo que supondría un gran beneficio para la humanidad: La Donación Universal Obligatoria de Organos. Sí, ya sé que suena utópico y que encontraría dificultades de tipo político, religioso y más aún de la industria farmacéutica, verdadero Trust de un poder inmenso como ha podido comprobar Obama con la reforma sanitaria en EE.UU. pero sería una buena ocasión para que la Organización Mundial de las Naciones Unidas se ganara un respeto que ahora no tiene.

Estas son algunas razones:
1- Se acabaría con las mafias y el comercio ilegal de órganos, una verdadera atrocidad para los jóvenes del tercer mundo.
2- Se acabaría con otras mafias mejor organizadas, las "Big Pharma" , Roche, Pfizer, Glaxo, Merck etc., que acumulan tanto poder como la industria de armamento.
3- Se acabaría con la negación de familias a donar. En nuestro país, el más generoso del mundo como donante de órganos, se dan casos de familias que han recibido órganos que han salvado la vida de alguno de sus miembros y sin embargo no están dispuestos a donar los suyos si llegara el caso.
Y 4º- Nadie moriría por falta de órganos.

En cualquier caso, mientras esto llega, no cuesta nada ahorrarle a la familia el mal trago de tomar una decisión en un momento tan crítico. Mejor, evítales la incertidumbre y deja clara tu voluntad: hazte donante de órganos.

Los perdedores

 La estética del perdedor ha dado mucho juego en literatura; grandes cornudos como Karenin o Charles Bovary son algunos de los personajes del XIX, pero sin ir tan lejos en el tiempo o el espacio, en nuestro país tenemos a muchos juguetes rotos que, creados por los medios de comunicación, fueron reyes y reinas por un día, vivieron el éxito y la gloria y se esfumaron enseguida; hoy forman parte del club de los olvidados.

Siempre me he negado a hablar de Belén Esteban por salud mental pero cuatro o cinco millones de audiencia dan que pensar. Una creación artificial a la que hacen bailar y hablar sin que conozca los terrenos que pisa, se evaporará pronto; veremos como asimila ser un nuevo juguete roto. A otros muchos les pasó antes; ahogados por las burbujas del éxito pronto se convirtieron en pompas de jabón.
El boxeo es quizá el deporte que más juguetes rotos ha dado, incluso los que llegaron más alto como Fred Galiana, Urtain, Pedro Carrasco o Luis Folledo también perdieron. Pero hay muchos más.
Abraham Olano iba a ser el nuevo Indurain, los pronósticos le daban otros cinco tours; no ganó ninguno.
Aranjuez era una fiesta cuando Portillo debutó en el Bernabeu como un nuevo Mesías del madridismo; hoy está de reserva en el Osasuna.
Sergio García "el niño" había nacido para disputarle todos los trofeos a Tiger Woods el mejor golfista de la historia. Iban a tratarse de tú a tú, ¿alguien sabe quien es Sergio García?
Rosalía era otra niña prodigio como Marisol y Rocío Durcal, ¿alguien se acuerda de Rosalía? Francisco lo tenía todo para ser el nuevo Nino Bravo: voz y presencia, ¿que es de él?
La aparición en el mundo taurino de Rivera Ordóñez fue la más deseada: hijo de Paquirri, nieto de Antonio Ordóñez y biznieto del "Niño de la Palma" ¿alguien da más? Hoy es carne de la prensa del corazón y torea en plazas de segunda.
En política, los ex suelen terminar con el riñón bien cubierto en la empresa pública o privada, dando conferencias, o bien otorgándoles un puestecillo en Europa. Pero recuerdo a un líder del PP nombrado por Fraga que fue un fiasco monumental ¿"Ande" está Hernández Mancha?
El cine también ha dejado a grandes artistas en la cuneta, no doy nombres porque aquí la lista seria demasiado amplia.

Adolfo Domínguez tuvo la suerte de que los chicos de Miami Vice vistieran sus trajes. Desde entonces, todo fue coser y vender, tiene establecimientos en el mundo entero pero su caída en picado es imparable. No le basta todo el dinero que ha hecho con la estupidez de que la arruga es bella y culpa a los trabajadores españoles de nuestra situación económica y de paso de la suya. Cree que deberían trabajar doce horas y por los mismos sueldos que suele pagar a los niños que tiene empleados en sus fábricas de confección de Asia.
Este español de pacotilla tiene todo el derecho a expresarse así; el mismo que yo para decirle que es un personaje indigno.

Knut Hamsun

La feria del libro de Madrid 2010 rinde homenaje a la literatura nórdica. El boom de la trilogía Millennium de Stieg Larsson ha influido sin duda. Esta circunstancia nos da la oportunidad de conocer, a quien no lo haya leido, a uno de los más grandes de la literatura, el premio Nobel 1920 Knut Hamsum.

Durante mi particular periodo de entreguerras –perdón, de entrematrimonios- viví dieciocho años en un sinfín de apartamentos (en no menos de quince) en los que iba dejando docenas de recuerdos afectivos junto con cosas materiales. Mi hijo me ayudó al menos en doce ocasiones a realizar las mudanzas en las que siempre me acompañaban mis libros. Muchos se quedaron por el camino, pero hubo uno, solo uno, que me acompañó siempre y aún sigue conmigo desde que tenía dieciséis años, se trata de Las Obras Escogidas de Knut Hamsun, editado por Aguilar en 1962. El volumen incluye seis obras de las que yo me quedo con tres: Hambre, la primera que publicó lanzando su nombre a la fama de un modo sensacional, Victoria, una historia de amor de juventud que fluye de una manera exquisita y, sobre todo, Pan, quizá uno de los mejores exponentes del hombre en su relación con la naturaleza y otra gran historia de amor. Esta obra, una de las que tengo en la mesita de noche junto a  otros libros de cabecera, tiene los lomos de plástico verdes y las hojas son tan finas que es una delicia el pasarlas mientras te embebes con esa manera de juntar palabras que es patrimonio de los grandes.

Cuando Hitler invadió Noruega, Knut Hamsun era ya un octogenario que amaba la naturaleza y odiaba la ciudad. Qué es lo que lleva a un hombre tan culto como él a abrazar la ideología nazi, que nunca reflejó en sus obras, es algo difícil de explicar. No es extraño que en su país no tenga ni una calle ni una plaza con su nombre; es difícil disociar vida y obra pero su calidad como escritor no admite dudas.
Pasear por la feria del libro se convierte en uno de los mejores días del año para mi, siempre me siento atraído por algún libro que compro, aunque sé que no lo voy a leer, pero si no, no sería yo.