Blog variopinto como su propio nombre indica, donde pienso hablar de todo incluido el sursum-corda
Tuesday, March 09, 2010
En Tierra Hostil
La primera industria en los EE.UU. es el armamento, la segunda: el cine. Si les va bien a ambas, le va bien a los EE.UU. No es por casualidad que en los carteles anunciadores de las películas de Hollywood y más aún en los juegos de ordenador veamos con tanta frecuencia armas, armas y más armas. En Santoña tienen las mejores anchoas del mundo, conclusión: ahí tienes al presidente de Cantabria que cualquier día de estos se va a convertir en anchoa de tanto celebrarlas.
En Norteamérica la gente no suele ir por la calle con armas, o, al menos no se aprecia, pero las estadísticas dicen que es el país más armado del mundo (2,1 armas por habitante). Durante la crisis que empezó en 2008 las ventas del revolver Smith & Wesson batieron todos los récords. En un país donde el miedo se ha instalado interesadamente, cualquier noticia que ayude a crear pánico crece como la pólvora. No sólo viven con el miedo a ser atacados, sino con la certeza de que pueden serlo en cualquier momento; por ésto se arman hasta los dientes, porque piensan que los parados asaltarán sus casas, temen hasta a sus propios vecinos; éste es, también, el American Way Of Life.
En Tierra Hostil es una película bélica que no pone en cuestión la guerra; me recuerda en exceso a Black Howk Derribado por esa manía de rodar con la cámara al hombro para dar un supuesto realismo, más cercano al documental, que lo único que consigue es poner nervioso al espectador con el excesivo movimiento de la cámara.
Como estudio psicológico de tres hombres con chute de adrenalina porque tienen que matar o morir se puede entender.
Se ha llevado el Oscar a la mejor película; pues que bien.
En Irak han muerto hasta ahora 4.500 soldados estadounidenses y 600.000 Irakies,es un país desolado, donde hasta los gatos está hechos una pena.
Yo creo que es un buen momento para hacer un cine más comprometido, sin renunciar a la calidad, que denuncie esta sangría tan cruel e innecesaria. Porque aquí, en Irak, o en cualquier parte, no mojarse significa estar al lado del más fuerte.
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