A Trinidad Jimenez, nueva ministra de Sanidad y Política Social hay que desearle éxito en su gestión porque no lo tiene fácil, las dos paisanas que la precedieron dieron mucho juego.
Celia Villalobos nos enseñó como se llamaba la enfermedad de las vacas locas (espungi que?) y de paso aconsejaba a las amas de casa españolas que no echasen huesos de vaca a los guisos , que los de cerdo sabían muy bien y que había que hervirlo todo para que se murieran los bichitos. lo del PP con los bichitos es una constante, gracias a ellos sabemos que se caen de la mesa y se matan.
Lo de Magdalena Alvarez no le va a la zaga, durante su gestión ha llegado el AVE a Málaga y a Barcelona incluso se dice que ha dejado todo bien encauzado, pero, está claro que pasará a la historia por sus despistes, sus problemas con la nieve y los aeropuertos, su incapacidad expositiva, en fin, un disfrute para la derecha.
A "la Trini" como ya la han bautizado en Intereconomia, la van a mirar con lupa por malagueña, ojalá que esta gran conocedora de América latina haga bien los deberes.
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